el origen del origen de nuestro todo
VIDAS DE PIEDRA
Des/narrado
por Amonsi Urriaga (Amur)
«UNIVERSO PÉTREO»
--EPOPEYA DES/NARRADA—
Foto Portada
Y fue
así… O al menos es así; como nos ha llegado este parecer a nuestros
huérfanos días. AUTOR: Amur – y
(Homo/desnarrador).
Así fue el origen del origen de nuestro
todo.
PRESENTADA EN ESTE LEGAJO DESNARRADO POR
ESTE ORDEN:
a) CÓDICE DE LOS TOSNANOS.
b) EPOPEYA DESNARRADA DEL UNIVERSO PÉTREO.
Risco Erguido: Foto 1.-
****///****
a)
…
CÓDICE DE LOS TOSNANOS (Cts.)
«si no tiene fin, no debió tener un principio»
Apreciaciones des/narradas de este indicador,
que nos abre las puertas para acercarnos de manera digna a la «ESTIRPE/DIA» del
«UNIVERSO PÉTREO / UNIVERSO PEDROLO»
--EPOPEYA
DES/NARRADA--
UNA NO/INTRO COMO EXORDIO A ESTE CÓDICE DE LOS
TOSNANOS
No es frecuente UN CÓDICE con una INTRO, al
contrario, y mucho menos un EXORDIO A LOS SERES VIVOS DE PIEDRA.
Hemos considerado con este título una pequeña
aclaración para que ayude al posible lector. Al investigador futuro le deseamos
muchos éxitos y que configuren su propia bitácora, aunque sería para nosotros
un honor que contaran con nuestras des/narraciones pero jamás tomarlas como
guías, posiblemente sea nuestro entender y no por ello tiene que ser el más
acertado.
No es un ÍNDICE, ni una GUÍA CONCRETA, ni UN PLANO
DE ENTENDIMIENTO. Ellos, sí que elaboraron varios códices, tal
como se desprende de sus des/narraciones pétreas, pero desconocemos el por qué
y para qué. Si sabemos que, en nuestra cultura, eso de previos, introducciones,
resúmenes, se ha adoptado como un hábito irremplazable, y es por ello que hemos
tratado de des/descodificar este Cts. pues puede abrirnos algunas puertas de
las que no encontramos llave aparente.
Si con ellos contribuimos a poder aclarar un poco
más, nos esforzamos en ello, prometer no es posible, pero sí que nos
dedicaremos a tratar de encontrar, descubrir, localizar. Puede que lo tengamos
delante de nuestros ojos, pero no somos capaces de des/descodificarlos aún; es
más desconocemos si un día se podrá.
Por ello con nuestro mejor impulso y nuestras ganas
de dar a conocer este gran legado, nos hemos esforzado en realizar la
des/narración de un códice, al que creemos uno entre otros, es más: ni siquiera
sabemos si es un códice, y para qué sirve en esta des/narrativa pétrea: PERO
AQUÍ LO BRINDAMOS COMO NUESTRO PRESENTE A TODOS LOS QUE SE HAN INTERESADO,
y por rebote imparable, al resto de sujetos a los que le pueda ser de utilidad:
entre ellos a los «SERES PÉTREOS» esos «SERES VIVOS DE PIEDRA», que en silencio
aparente siguen ahí, presentes en cada paso. Muchas veces ignorados y cuando
más maltratados. Saben sin ninguna duda quienes han sido, quienes son; y tienen
muy claro que serán. Nosotros ni
cuenta nos damos de su impagable legado.
No nos culpen, sólo es por ignorancia… somos sólo
seres biológicos, somos bacterias en la forma actual, somos en definitiva
PIEDRAS; que aún hoy, desconocemos nuestro pasado, por ello no comprendemos el
presente. Y si no lo hacemos: hablar de futuro se convierte en algo sin
sentido, algo que tal y como nos enseñan los seres pétreos: el futuro no es más
que LOS VENIDEROS TIEMPOS INCIERTOS.
«CÓDICE DE LOS TOSNANOS»: de los JOHIS y su legado. (Cts.)
…Observamos
que a cualquier lugar que mirábamos todo eran huesos y formas desperdigadas.
Comprobábamos que nos querían comunicar «algo». Al tiempo nos dimos cuenta que
eran lo mismo que nosotros mismos, sólo que eran parte de nosotros. No
entendíamos que hacían desperdigados por todo el campo, si a la vez formaban
parte de nuestro bloque.
Es por eso que aprovechamos unas partes de aquellas
que estaban más finas, cortantes, para pintar sobre otras, lo que éramos
nosotros. Eran muchas y muchas y nosotros éramos pocos.
Cuando comenzamos a dibujarnos nos dimos cuenta que
necesitábamos identificar la diferencia entre ellas y nosotros, y fue como
surge el término JRHOIS que se hacía muy confuso, por ello especulamos como
JHOIS y nos pareció adecuado.
Por ser tan pequeños, tratamos de diferenciarnos.
Descubrimos que existían otros aún más pequeños, en granos, eran mínimos (les
llamaron arenas en general los humanos) por eso JHO acuñamos como “grumo”
“arena” y IS como algo mayor: LOS JOHIS.
Luego percatamos que nosotros, aunque algo mayores
que aquellos “nosotros” desparramados éramos todos lo mismo, con una condición
sola, que nosotros somos varios de los JOHIS juntos y unificados. Aún así,
bastante enanos. Surge la identificación de TODOS y PEQUEÑOS, aunque más
grandes de grupos, que eran insignificantes en tamaño. seguíamos siendo
pequeños y casi enanos. Concluimos que lo mejor era que juntar TODOS y ENANOS
podría ser los TO/S/NANO y diseñamos el término TOSNANOS con ese muchos de la S
(recalca el SER) pero sin ser grandes elementos, o seres como luego se nos
denominó en el batir de los tiempos.
PREVIOS DEL
CUENTO PRIMERO – CITA NO NUMÉRICA DE ESTE SECUENCIADOR (clasificados por los
des/narradores).
…/…
«ya el equipo des/narrador concilió en denominarlo
por un nombre y que entendimos muy acertado como: «CÓDICE DE LOS
TOSNANOS»: de los JOHIS y su legado. (Cts.: Códice de los Tosnanos)
TORNA (se refiere a una aclaración o nota): Este pequeño texto/exordio inicial es una
traducción lo más cercana posible a los grabados encontrados. Sin duda lleva
impregnado un contenido literal acorde a nuestros días y nuestra evolución en
la historia. Desconocemos una interpretación más fidedigna, pero para que lo
podamos entender, es una manera de clarificar el inicio de este texto de
incalculable valor des/historiado para los venideros tiempos inciertos.
Lo que en principio quisimos llamar oscuridad, no
lo era. Descubrimos que tras las nubes de partículas brillaba de una manera
intensa una gran bola de fuego que no podíamos definir, puesto que sentíamos,
pero no éramos capaces de mirar. Carecíamos del sentido de la vista, aún no
disponíamos de órganos capaces, aunque si intuíamos por el grado de calor que
nos transmitía una gran capacidad de calentar: de energía/s.
Descubrimos a los años, a los
siglos, que efectivamente, nuestra intuición de claridad era cierta. Pero si
hubiésemos percibido visualmente todo hubiese sido oscuro, provocado por las
grandes nebulosas de partículas que dominaban todo eso que al tiempo llamamos
UNI/VERSO: «Hablar del universo es hablar del infinito: son el mismo».
y es que nuestra construcción no trata de ser única
en la interpretación de la vida y por tanto del devenir de la historia. Claro
que en un códice es sólo un mínimo resumen de todo lo que existe. Pero tratar
de situar sensaciones aún es más complejo cuando no tenemos una guía. De ahí
surgió la idea de unas piezas indicadores, pues carecemos de modelos, no existe
nada… pero si se nos ocurrió que estamos y por tanto algo debemos ser.
«Estas guías (por los Códices) harán que podamos
saber cómo somos nosotros y por eso nos tratamos de ver desde fuera».
Supimos así que en efecto EXISTIMOS. Fue el impulso
primero para atrever a «imitarnos» tallando sobre algunos de nosotros visiones
de cada uno. Tuvimos conciencia primera de que estábamos y no sabíamos nada de
nada. No sabíamos ni que éramos algo. Pero es que algo había, pero nosotros no
lo entendíamos.
TORNA: Al tiempo si miramos; porque somos, reflejo de
cada cual. Y cada cual no puede ser sin muchos, o como mínimo un JOHIS.
Entendimos pues lo que significó el reflejarnos en un ESPEJO.
Muy posiblemente ese impulso primero determinó el
devenir en los cercanos, medios y lejanos venideros tiempos inciertos.
Nos dimos cuenta que el impulso de vida, sea como
sea esta, trata de evolucionar. Descubrimos que algo nos impulsaba y nos daba
capacidad para tallar / dibujar…
… y de aprender. Aprendimos des/dibujándonos unos
frente a otros por sensación de percepción, y así nos dimos cuenta lo que luego
fue requisito imprescindible para vivir a continuación de los nutrientes: le
llamaron COMÚN INICIACIÓN («comunicación»).
«Si antes no hubo, ahora todo está por venir;
pero sin poder llegar a un punto».
Con
esta cita más que vidente, nos abre el apetito de conocer algo más sobre todo
esto.
LA VIDA, se abre paso, y con ella aparecieron los nuevos seres. «LOS
SERES PÉTREOS».
Entendimos al recrearnos en nuestros trazos, que
éramos aquellos Johis unidos hasta lograr montones más estáticos; como un puzle
con Tosnanos: Crecíamos, adquiríamos movimientos y nos desplazábamos.
Pero
nos movíamos aquellos que habíamos sido contaminados de millones de
pequeñísimos seres que se nos adherían por todos lados. Eso fue lo que hizo que
nos desplazáramos. Sin ellos no podríamos habernos movido ni un centímetro.
Esa
fuerza brotaba de sus capacidades y fortalezas que nutrían con el líquido
elemento que por todos lados estaba: EL AGUA.
Este
líquido cambiaba de forma, se esfumaba como gas y luego volvía como gotas sobre
todo lo visible. En ese conjunto enorme de simbiosis con los elementos y que
cubrió, en un principio, todo lo material, permaneciendo sólo las cumbres más
altas fuera de ellas.
Mientras
tanto, los seres microbios poblaban a cada uno de nosotros y nos hacían tener
independencia y sensaciones.
Entre los millones de esos seres vivos, que luego
se sabrá que fueron los primeros seres biológicos que darán forma generalizada
en distintas especies, capacidades, edades … pues surgieron otros que competían
con su espacio y que denominaron VIRUS, pues trataban de dominar espacios. Si
nos fijamos, estos nuevos seres que a los venideros tiempos inciertos les
llamaríamos biológicos, fueron los que aportaron la competencia y la lucha del
más fuerte. Y también entenderemos en la comparativa que su propia esencia es
lógica, son seres que nacen y crecen… tratan de replicarse o reproducirse, y
luego mueren. Al contrario de nosotros los seres pétreos, nosotros no sabemos
que es de desaparecer (desconocen el término y la acción de la muerte). En
realidad, en ellos se manifiesta por primera vez, el axioma físico de la
energía. Nunca son destruidos, cambian de estado según las circunstancias.
Sobre pequeños Johis nacen tosnanos, y la unión de esto nos crea a nosotros.
Luego los seres (que en los venideros tiempos inciertos se denominarán
BACTERIAS) nos van poblando y haciendo mover, ver, sentir, comunicar. Ellos sí
desaparecen, nosotros nos convertimos en diversas “grabas” que, con los años,
el agua, las temperaturas, los gases; nos volverán a crear como otros nuevos seres
pétreos, alzados sobre los restos de otros seres antepasados. No hay un
nombre, un concepto, un hecho para la muerte…
Es decir, no tienen percepción del fin, del final. Desconocen
igualmente que es EL PRINCIPIO.
Si bien es cierto que al «reflejarnos» mediante
picados en otras piedras, comprendimos que existimos. No sabemos bien ni porque
ni para qué, pero existimos (des/narración aproximativa). Percibimos que
estábamos en un lugar del UNI/VERSO infinito y que, aunque no lo percibimos,
entendimos que tras una parte tan llena de energía y luz, quedaría otra parte
sin esa misma energía y sin iluminación.
TORNA: Sin saberlo, sin ni siquiera percibirlo estos
Tosnanos habían razonado: según desprenden sus manifestaciones en algunos
pigmentos de las piedras. Se dieron cuenta que se podían describir y además se
podían reflejar mediante el tallado. Por tanto, al verse, se dieron cuenta que
contaban con esa capacidad creativa y se sintieron muy extrañados. Pero aún más
profundo fue percibir que si ellos estaban en un lado; tenía que existir otro.
Y son estos hechos tan naturales, tan del caos, tan sencillos… los que le
abrieron las puertas a un desarrollo posterior según iremos matizando en lo
poco que podemos entender, siempre bajo nuestra propia óptica, de toda una
estirpe que posiblemente, esté totalmente enraizada con el devenir de nuestros
días, o como ellos llamaron a nuestros tiempos de ahora: los venideros tiempos
inciertos.
Aunque no es hasta un tiempo más lejano cuando
observan que hay más bolas de fuego, y que otras muchas van y trazan los cielos
como si fuesen de un lugar a otro. Unas dejan una larga estela y otras al caer
provocan ruidos y movimientos. Comienzan
a darse cuenta de la realidad de un entorno que los envuelve y que ellos son
parte de él. TORNA: Adjuntamos con este
Códice la fotografía de uno de los legajos que hasta ahora encontramos como más
avanzados, para que el posible lector tenga una pequeña muestra de cuál es la
labor des/narrante a la que nos enfrentamos. Podemos percibir, en ella, una
secuencia de símbolos rayados o picados y que, en este caso, para asombro de
nuestro equipo, detectamos secuencia de repetición a modo de primitivo
alfabeto, aunque no olvidemos que entendemos que no es su intención narrar
nada, ni mucho menos dejar constancia de nada. Esa forma de pensar tardará aún
muchas ERAS, EDADES y millones de AÑOS en aparecer.
«La constante a que queremos referirnos es a la
aparición de un referente constante a la figura de RISDO ERGÜIDO, desconocemos
su significado aún, sí que tenemos que descartar cualquier referencia al
animismo, en dioses u otros seres, es imposible que se dé lo más mínima en esos
tiempos anteriores, muy anteriores, a lo que hoy se define como pre/historia».
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